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Centroam. y Caribe
República Dominicana

Costa Norte Dominicana: auténtica y especial

Con Santiago de los Caballeros como ciudad cabecera, la zona reúne un puñado de interesantes poblados donde es posible entrar en contacto con la cultura dominicana, disfrutar de la vida nocturna y saborear una excelente gastronomía.
De los automóviles se escucha una sinfonía alegre que invita a mover las caderas y las dominicanas pronto aceptan el convite. Se las ve danzar en las veredas, antes de ingresar a las discotecas, intentando seguir la melodía ligera del merengue, con sus tacos altos y sus polleras diminutas. La alegría se percibe a flor de piel en la República Dominicana, especialmente en su costa norte, donde los turistas pueden tomar contacto directo con el pueblo.
Allí, además, reinan paisajes diversos que se complementan a la perfección con la playa: bosques deslumbrantes, majestuosas montañas, ondulados senderos forman parte de un escenario versátil, ideal para disfrutar en plan de aventura. Así, cuando baja el sol es posible emprender un paseo en mountain-bike, realizar kiteboarding -una actividad similar al windsurf- y escalar un cerro.

Estilo victoriano.
Inspirado por ese majestuoso paisaje, Cristóbal Colón bautizó a la primer comarca de la región como Puerto Plata, cuando vio la forma en que el sol se reflejaba en el mar. Luego toda la costa adquirió la denominación de Ambar debido a la preponderancia de esta piedra semipreciosa.
Con 200 mil habitantes, Puerto Plata es la ciudad principal de la zona, flanqueada por viviendas de estilo victoriano y calles angostas muy pintorescas donde se puede escuchar merengue. Para dejarse envolver con la historia y la cultura local, lo mejor es visitar la Vieja Ciudad, el Parque Central y el museo del Ambar, que exhibe piedras semipreciosas, así como plantas bien conservadas, insectos y animales.
La noche es un momento especial en el destino, donde los acordes del merengue suenan con más fuerza desde los innumerables bares y discotecas que se encuentran en el área.
A unos pocos minutos al este de Puerto Plata se encuentra una de las más impresionantes playas de la isla: Cofresí, especial para la práctica del surf. Mientras que al este del destino se emplaza playa Dorada, con uno de los complejos hoteleros más importantes de la zona con campos de golf, restaurantes y discotecas. Protegida por arrecifes, la playa es un excelente sitio para relajarse y asolearse. En la zona también se encuentra Playa Grande, localizada cerca de Luperón, una de las más largas en la costa norte. Para los amantes del buceo playa Punta Rucia posee un gran arrecife de coral -en particular cayo Arena- y barcos hundidos para explorar. La mejor época es de junio a septiembre, cuando el agua está calma y hay mayor visibilidad.

De todo un poco.
Hacia el este despunta Sosúa, emplazada en una impresionante bahía del Caribe, rodeada de playas de arenas blancas, formaciones rocosas y lujosas viviendas y resorts. Antaño aldea de pescadores, actualmente es un destino vibrante que combina lujosas boutiques con resorts de alto nivel, restaurantes con bares.
La playa ofrece diversas actividades, como paseos en barco con fondo de vidrio, buceo entre tiburones y natación con delfines. Tanto para principiantes como para los más expertos en buceo, Sosúa es el lugar ideal, en particular Las Palmitas, el Aeropuerto, Cinco Piedras y La Pirámide.
Orientado a un público joven o a los que se inclinan por el turismo aventura, Cabarete ofrece todo lo necesario para pasar una estadía única. Es que su playa fue catalogada como una de las cinco mejores del mundo para la práctica del kiteboarding y el windsurf. También posee escenarios privilegiados para los entusiastas del mountain-bike y montañismo.
Así como durante el día los jóvenes tienen la diversión asegurada, para la noche Cabarete propone más entretenimientos en los bares y discotecas donde se presentan artistas en vivo, todos ellos alineados en torno a la Carretera 5.

Playas y algo más.
La cultura dominicana recibió influencias del legado de los esclavos africanos, algo que se pone de manifiesto en Samaná, donde se celebran cada año -todos los viernes desde fines de agosto hasta fines de octubre- una serie de festivales anuales de la cosecha.
Localizado en la parte sur de la península, a lo largo de la bahía del mismo nombre, el poblado de Samaná se utiliza como punto de partida para realizar las excursiones de observación de ballenas o viajes a Cayo Levantado. Además, en su Malecón confluyen los cafés y las pequeñas tiendas al aire libre.
En la zona se puede disfrutar de la playa Las Galeras, que de aldea de pescadores devino en un destino turístico conocido por sus grandes resorts. Sin embargo, debido a su localización remota, el lugar supo conservar los escenarios vírgenes y una atmósfera serena.
Desde allí parte barcos rumbo a playa Rincón -según Conde Nast Traveler es una de las primeras diez en el mundo- o cabalgatas por la playa hacia otros destinos cercanos, como Las Terrenas, que cuenta con una gran variedad de alojamientos, que van desde los todo incluido hasta confortables hoteles boutique.
En las inmediaciones están las playas Bonita, de arenas blancas y aguas claras color turquesa; Las Flechas, localizada en la franja sureste de Samaná, un destino sumamente tranquilo; y Cayo Levantado, una pequeña isla localizada a un par de metros de la costa de la ciudad de Samaná. Como el ferry suele estar muy lleno, es importante tomarlo temprano desde el puerto principal de Samaná.

Informes: www.godominicanrepublic.com.


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